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NOTA PUBLICADA EN «DIARIO CASTELLANOS» EL MIERCOLES 5 DE MAYO DE 2010

Inauguró el edificio más alto de la ciudad

El proyecto de las firmas Benuzzi-Cam inauguró ayer sus instalaciones. Departamentos de uno, dos, tres y cuatro dormitorios dispuestos en semipisos exclusivos, y plantas completas en los pisos superiores, son las alternativas que ofrece este ambicioso emprendimiento.
En horas de la tarde de ayer tuvo lugar el acto que dio formal inauguración a la Torre Piemonte, un edificio emplazado en Avenida Mitre 680. Lo novedoso de este inmueble es que logró aunar conceptos estratégicos de confort y estética en una majestuosa obra de verdadera altura.

Torre Piemonte priorizó la calidad constructiva otorgando absoluta amplitud en los espacios, con diseños perfectamente adaptables a la necesidad del cliente. Los departamentos cuentan con una gran superficie, muy buena categoría y una ubicación privilegiada ya que se trata de una torre de veinte pisos que se eleva a pasos del Microcentro de la ciudad.

El edificio tiene un jerarquizado ingreso con formato de lobby, departamentos de uno a cuatro dormitorios dispuestos en semipisos exclusivos, y plantas completas en los pisos superiores.

Entre los espacios comunes que pueden aprovechar quienes opten por vivir en Torre Piemonte se encuentran una piscina, un solarium, una sala de usos múltiples y una incomparable vista que podrá ser disfrutada desde el mirador ubicado en la terraza o bien, desde los amplios balcones de las unidades.

Torre Piemonte es la concreción de un proyecto del grupo santafesino Benuzzi, desarrollado conjuntamente con CAM Construcciones. La inversión superó los $5 millones de pesos. En Rafaela es Gaggiotti Inmobiliaria a quien se confió la comercialización del edificio. Oportunamente, Plubio Benuzzi, titular de la firma santafesina, manifestó al respecto: «Nos sentimos plenamente identificados con Gaggiotti; se trata de una sólida empresa familiar, con historia en la región al igual que nuestra empresa en la ciudad de Santa Fe, donde los clientes sienten seguridad de invertir por el solo hecho de que, quien está al frente de la intermediación, ofrece seguridad y respaldo».

Plubio Benuzzi agradeció la presencia de los asistentes a la inauguración: «Muchas gracias por la presencia de todos ustedes. No es una palabra más; es un sentimiento, porque para nosotros, si bien estamos muy incorporados en las actividades diarias con esta ciudad, estar hoy en Rafaela sinceramente nos alegra muchísimo». Y agregó que «les queremos agradecer a todas las autoridades locales, al Padre (Monseñor Franzini), a todos los amigos, a los grandes hacedores de esto que son los obreros de la construcción -que fueron los que más sintieron esta experiencia- y a la firma Gaggiotti Inmobiliaria. A ellos le hemos delegado la venta del edificio en base a la experiencia y en base a la honestidad que ellos mismos nos han manifestado y transmitido acá en la ciudad de Rafaela».

En relación a la idea originaria de la construcción del edificio, Benuzzi explicó que «no es que nosotros quisimos salir de la ciudad de Santa Fe para invertir en Rafaela. Nosotros, gracias a Dios, junto con la empresa CAM -que fue el mentor de este negocio y no tengo más que agradecimiento para la gente de CAM-, despertaron lo que estaba siempre en mi sueño, que era ver qué era Rafaela. Yo venía en mi juventud a jugar al rugby y siempre me impresionaba la pulcritud, la limpieza, el orden de una ciudad que diríamos, dentro del orden de belleza, no tenía bellezas naturales. No había ríos, a lo que estábamos acostumbrados a tener nosotros en Santa Fe. No había montañas; pero sin embargo, era una ciudad que siempre me daba paz, me daba tranquilidad, me implicaba decir `qué lindo sería vivir en Rafaela´, cuando no tengo parientes en Rafaela y ni siquiera amigos en Rafaela».

Entonces, Benuzzi continuó con su relato acerca de la decisión de construir en nuestra ciudad: «Surgió la idea de construir en Rafaela por el famoso ´bum sojero´, por todo lo que se habla de captar el dinero externo. Eso a mí personalmente no me motiva ni me motivó nunca porque estar en los bum inmobiliarios, construir con la plata del otro -ya que todo el mundo tiene exceso de dinero sin preocuparse realmente por hacer las cosas bien, sino por vender-, no me seduce».

De ese modo, el empresario del grupo Benuzzi argumentó que comenzaron con la obra «cuando el país estaba en llamas. Era el 2008 donde los famosos especuladores del mundo inmobiliario habían repartido el mercado. Es lo que más nos motivó a mí y a mis socios, a intelectualmente esforzarnos para hacer las cosas bien».

Plubio Benuzzi no es arquitecto de profesión, sino abogado. Sin embargo, trabaja desde hace muchos años en la construcción. Y hubo una famosa escuela del año 20 (Escuela de la Bauhaus) que siempre lo sedujo. «Un grupo de arquitectos (de la Bauhaus) materializaron lo teórico con lo práctico. Y es lo que yo quise transmitir a la gente que colaboró con nosotros, de hacer acá en Rafaela. ¿Por qué? Porque el antecedente era ´No, en Rafaela hacer un edificio de altura es imposible´; ´la gente está acostumbrada a vivir en casa´; ´en Rafaela a lo sumo un edificio bajo para minimizar el riesgo´».

No obstante, Benuzzi relató que analizó comparativamente la ciudad de Santa Fe junto con la nuestra. Y concluyó que Santa Fe cometió el error de expandirse para el norte a causa de que las inundaciones de esa época ocurrían en dicha zona, «para el lado de Aristóbulo del Valle». «Eso generó una descoordinación: no acompañaron los servicios públicos, no acompañaron el gas, la luz ni el agua. Y se transformaron en zonas periféricas de asentamientos». Continuó expresando que frente a ese antecedente «nos quisimos adelantar acá en Rafaela, porque Rafaela no es que puede llegar a correr el mismo problema que Santa Fe, lo va a tener necesariamente por una relación poblacional».

En cuanto al nombre que se le dio a la torre, Benuzzi especificó que «nosotros fuimos cuidadosos hasta en la elección del nombre del edificio, porque le podríamos haber puesto cualquier nombre vanguardista. Pero yo empecé a escuchar desde joven que acá en Rafaela está el mayor asentamiento de italianos de Piemonte, y uno en el fondo también tiene sus raíces italianas. Y comenzamos a soñar con el nombre `Torre Piemonte´».

Por último, el titular de la firma Benuzzi agradeció a los proveedores rafaelinos, quienes estuvieron a la altura de la obra y respondieron de forma eficiente y comprometida. Asimismo reconoció el talento del arquitecto Nicolás Cuesta, quien se encargó del diseño del proyecto. Finalizaba diciendo: «Tengo un altísimo agradecimiento para la empresa CAM que, independientemente del aporte del dinero, tuvo una seriedad en el manejo de la empresa que permite que este coctel transmita una cosa tan linda. Ahora hemos depositado toda la confianza y la responsabilidad a la empresa Gaggiotti. Espero que nos sepa interpretar y transmitir nuestro esfuerzo en la venta, que para nosotros es secundario porque lo más importante, el objetivo, está cumplido».

Inmediatamente después de las palabras de Plubio Benuzzi se procedió al clásico corte de cintas para dar por inaugurada la torre, y como no podía ser de otro modo, Monseñor Franzini pronunció la correspondiente bendición, augurando éxito en la comercialización.